Palabras: Faby y Angel, celebramos de todo corazón su amor, su felicidad, su alegría, su presente.
Así como los sueños se trabajan para verlos hechos realidad, de la misma manera una nueva familia trabaja con amor, paciencia, creciendo juntos, escuchándose y charlando, respetándose, siendo alegría y soporte el uno para el otro.
Pido a Dios que los llene de Su luz y que los enseñe, como sus hijos muy amados, a caminar siempre de Su mano, que sea Él el centro de Su vida familiar y que un día no muy lejano, sientan la necesidad del mayor regalo que pueden recibir, el Sacramento del Matrimonio.
Los amo, y les deseo un día a día pleno del uno con el otro, sin olvidarse de florecer individualmente.